Sobre las elecciones europeas del próximo 25 de mayo.
@xmlema
Las siguientes elecciones europeas son importantes. Claro que son importantes. Tradicionalmente son comicios con baja participación, que acompañados por el incipiente descrédito de los políticos y su falta de sintonía con los ciudadanos hacen que no haya mucha motivación en el electorado.
Pero son los políticos los que tienen que convencernos de que no todos son iguales. Son ellos, los que tienen que patear los pueblos y ciudades y darnos alguna razón para que el próximo 25 de mayo acudamos a las urnas, y ejerzamos el saludable acto de votar. Y hay muchas opciones.
Que no esperen que sean los sufridos ciudadanos los que tengan que motivar a los partidos. Es su deber y compromiso saltar a la arena y pelear cada voto.
Las próximas elecciones europeas tienen el aliciente que llegan un año antes de las municipales. En la anterior ocasión llegaron dos años antes. Puede ser tomado como un entrenamiento por los líderes locales, que son fundamentales elementos de motivación, para que haya unos niveles de votación decentes o todo se quede unos porcentajes pírricos.
No son datos extrapolables, pero el que gana siempre vende la moto, y muchas veces aún sin ganar. Son comicios distintos pero afectan a la política nacional. Mariano Rajoy y Alfredo Pérez Rubalcaba no levantan pasiones y una nueva derrota puede abrir algunas heridas. Además es un examen importante para nuevas opciones que antes de su bautizo pueden estrellarse, o quizás tener en esta cita europea una plataforma de lanzamiento.
En definitiva, que siempre se resuelven dudas, y que en menor o mayor medida todo tiene su influencia en el sistema político. Y eso que no hablamos (será quizás en otras ocasión) de la importancia que tienen los foros comunitarios en nuestras vidas.
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